Para evitar que este tipo de diabetes afecte a la salud, tanto de la madre como el futuro hijo, es importante realizar algunos cambios en los hábitos de vida, por ejemplo, incrementando la práctica de ejercicio físico y controlando la alimentación, siguiendo las pautas de los profesionales sanitarios. Desde la Fundación para la Diabetes se recomienda, además, prestar especial atención a la hora de desayuno, pues se trata de la comida tras la cual se suelen registrar mayores subidas de glucosa, por lo que es conveniente optar por desayunos ligeros, repartiendo los hidratos de carbono, con moderación, durante el resto del día.
Para más información, consulta: “Todo lo que deberías saber acerca de la diabetes gestacional” (ConSalud.es).
